A mi mejor pasado

He leido tu carta y sabes? Me has dejado pensando.

Pensando en lo que pudo ser y no fue, y lo peor: ya no será, hemos dejado que poco a poco las pústulas de nuestras heridas se dejaran infectar, las vimos ahí, vimos su inflamación pero nos dejamos llevar por permitir que la infección llegara.  Como dices, nos conocimos y nos amamos dejando a un lado a terceros, llegué a ti sin fantamas ni renconres, y tu llegaste a mí de la misma manera , llegaste como se supone que debemos llegar: de improvisto, por sorpresa.

Dices que todo lo que planeamos fue en vano? Yo no lo tomaría asi, es cierto, a los dos nos falto el valor para comenzar y pelear por lo que queríamos, luego, con el tiempo; nos dejamos llevar por la rutina, yo, creía que te tenia segura para mi, tú, pensabas que siempre sería para ti. Si soy un mal recuerdo para ti, creeme que te digo que te lo agradezco, que sé que siempre estaré en tu pensamiento y en las tardes de lluvia que tantas veces compartimos sé que siempre te preguntarás qué tanto puedo haber sido real y suceder en el universo alternativo en el que tú y yo estamos juntos en esa misma tarde de lluvia.

Cuando leo que prometes no mentirte ni llorar se que te sucede todo lo contrario, te conozco tan bien como la palma de mi mano, se que las tardes con lluvia te sientas frente a la ventana con una tasa enorme de café mientras la lluvia pega en el cristal, se que te sientas con las piernas juntas y levantadas mientras tus pies descalzos  se recargan en el sillón en el que tantas veces nos arropamos juntos para ver la tarde caer. Así que no me digas que no tuve el tiempo de conocerte y decir que tampoco tú me conociste porque sabes bien que eso no es verdad.

Sabes que cuando las cosas comenzaron a ir mal fue en parte por los dos, por tus celos enfermizos y por tus ganas de cazarme, por acosar a todo el mundo que se acercara y por no dejarme respirar, sabes, que aunque lo niegues, la razón por esta vez es totalmente mía  y sabes? Siempre supe lo que hacías pero pensé que tal vez era una manera tuya tan particular de tenerme confianza, o de nunca hacerlo y pretender que lo hacías.

Sé que me buscas en la calle, en cada paso que das con la intención buena o mala de verme, del brazo de alguien de más. No te olvide tal vez, pero es necesario aprender de lo que tu y yo tuvimos para comenzar algo nuevo y mejorar con el tiempo, hoy, hoy me doy cuenta de tu inmadurez  y creo que el tiempo que tu y yo pasamos juntos fue de aprender, pero para mi, hoy amanezco con calma después de mucho tiempo, sin sentirme obligado y atrapado, sin sentir obligación y lealtad, porque sabes bien que al final de las cosas soy un tempano de hielo que se va a donde quiera, sin depender de nada ni de nadie, quizás claro, intenté estar contigo, pero soy un poco primitivo y salvaje, creo que de hecho mi instinto me hace buscar y mover, hoy estamos aquí, mañana ya no, pero no me importa.  

Hoy que veo tus líneas creo que estamos parejos, al final el ying y el yang se equilibró, y como dicen por ahí, si te vi, ni me acuerdo, pues después de todo, yo sigo aquí, mejor y más fuerte que nunca, pero después de los golpes, hoy, hoy creo  que estoy tallado en madera.